
Para nuestro especial del Día del Padre, te presentamos a seis papás top: Roberto Palazuelos, Moisés Zonana, Lorenzo Lazo, Rob Walker, Alejandro Mills y Humberto Zurita, quienes posaron con sus hijos y nos contaron lo que significa para ellos ser padres. Roberto PalazuelosHemos podido ver a Roberto Palazuelos en distintas facetas: como actor, empresario, promotor de turismo o de moda y, próximamente, como aspirante a la presidencia municipal de Tulum, Quintana Roo, ya que nos confesó que planea lanzarse como alcalde de ese municipio en las próximas elecciones. Sin embargo, en pocas ocasiones hemos sido testigos del papel que -afirma- es el más importante en su vida: ser padre. Nos cuenta que, desde hace 11 años, cuando tuvo entre sus manos a su pequeño, la vida le cambió llenándolo de un amor y ternura que nunca imaginó sentir. Desde el primer contacto con su bebé, supo de la relación tan profunda que los enlazaba.“Su nacimiento fue el momento más maravilloso que he vivido y desde ahí supe que nuestra conexión era muy fuerte, yo estuve presente en el parto, él estaba llorando y con mi dedo le acaricié el antebrazo diciéndole: ‘Aquí está tu papito bebé, te voy a cuidar siempre’, cuando él escuchó mi voz se calmó, para mí fue algo mágico”, recuerda.Cuando se enteró que se convertiría en padre, esperó con ilusión a su bebé, no imaginó que tenerlo en sus brazos iba a cambiar su idea de la paternidad. Confiesa que cuando lo vio se dio cuenta de la responsabilidad y amor que sentía.El actor nos dice que ha intentado inculcarle valores y educarlo de la mejor manera posible; trata de darle lo que cree que es mejor para su hijo y lo que le nace del corazón. Sus momentos de juegos son grandes experiencias y enseñanzas para ambos. “Él es mi sol, mi vida, mi alegría y mi mejor amigo. Compartimos muchas cosas juntos, somos esquiadores, buceadores, nadadores, nos encanta correr, él está clavado en la tecnología y ha sido mi maestro en esos temas y me siento muy contento de que sea así”, comenta orgulloso.Como presidente de los hoteleros de Tulum, ha hecho conciencia de la importancia de conservar la naturaleza y la mejor enseñanza que desea inculcarle a su primogénito es el cuidado del medio ambiente; “ahora que pasó lo de la destrucción de los manglares de Tajamar, lo llevé a ver la devastación ecológica. Para mí fue muy fuerte, no me pude contener, se me salieron las lágrimas y él me dijo: ‘Papá, te prometo que cuando sea grande los voy a cuidar, mi generación no va a cometer esos errores’. Eso me conmovió mucho, me hizo pensar que estoy educando a un niño con amor y conciencia sobre su entorno”. Aunque son muy unidos y disfrutan de estar juntos, admite que se considera un padre estricto en cuanto a la escuela; le exige a Robertito que se aplique, que entregue todas sus tareas y trata de tener la mayor disciplina en su horario para ir a dormir.Cuenta que esta disciplina la heredó de su padre, de quien —asegura— le enseñó “a perseverar, a luchar por lo que quiero, a forjar mi propio destino y ser muy deportista, cosa que ahora comprendo es muy importante y es lo que también trato de inculcarle a Robertito”. Aunque afirma que él ha preferido no ser tan estricto con su hijo. “A mí me tocaron algunas nalgadas cuando me portaba mal y yo soy incapaz de pegarle a Robertito, dejo que las cosas fluyan y me ha resultado mucho mejor platicar con él y así nuestra relación está bien”.Para el actor ha sido tan gratificante su papel de papá ya que nos reveló que le encantaría repetir esta experiencia pues espera volver a ser padre, esta vez, de una niña. Humberto ZuritaSin duda, cuando los hijos agradecen la educación, ejemplo y cariño de sus padres, éstos se sienten orgullosos y tranquilos por el trabajo que realizaron en todos sus años de paternidad, tal es el caso de Humberto Zurita, con quien compartimos una comida junto a Sebastián y Emiliano. Y es que al preguntarles acerca de las mayores enseñanzas que Humberto les ha dejado en su vida, Sebastián comentó: “Tratar de decir qué le he aprendido a mi papá en una sola frase es imposible, pues han sido diferentes procesos de vida, momentos y circunstancias, entonces ya sea de forma profesional o personal, mi papá ha sido un ejemplo”.Además destacó que admira el hecho de que su padre ha sabido balancear su vida, de manera que sin descuidar su carrera artística, ha estado en los momentos más especiales para él, recordando las épocas en las que lo llevaba a sus clases de Tae Kwon Do, los consejos que le compartió cuando tuvo miedos, el practicar equitación juntos y hasta rió al acordarse de una ocasión en la que subieron una montaña y se rompió el brazo, razón por la cual no pudo asistir a un torneo”. En este sentido, Emiliano afirmó: “Cuando yo tenga hijos voy a saber que no tengo excusa de no estar presente en las cosas importantes porque mis papás lo han hecho toda su vida, siempre han trabajado pero nunca nos descuidaron, ese ejemplo ha hecho que para mí, mi familia sea mi prioridad y es algo que pienso darle a mis hijos”.Con una gran sonrisa, después de tantos halagos, Humberto nos compartió que se sentía privilegiado y muy orgulloso de saber que había formado a hombres “hechos y derechos” y que la mayor enseñanza es dejarles claro que la vida sólo es una y que tienen que disfrutarla. No obstante, el actor no asume este logro solo: “Yo no puedo desprender a Christian de esto, creo que ella fue una parte fundamental de la educación de ellos dos”. Al preguntarles por su pasión, no dudaron en decir que viajar en familia es lo que más disfrutan ya sea en verano o en fin de año. Robbie Walker El escocés, apasionado del automovilismo y la F1, descendiente de Johnnie Walker, el fundador de la marca de whiskey (a principios del siglo XIX) decidió celebrar el Día del Padre en México pues afirmó que “en este país, me sorprendió, que las familias son muy unidas”. Vino con su hija Daysi para compartir su experiencia de viaje como papá e hija. A los descendientes directos de Johnnie Walker, Robbie y su hija Daisy, les fascina viajar por el mundo; tener nuevos amigos y compartir con otras personas el gusto por la legendaria bebida escocesa. Los miembros de esta familia que fungen como los principales embajadores de la marca, visitaron recientemente nuestro país, hicieron un tour por los principales museos de la Ciudad de México, disfrutaron de la cocina mexicana contemporánea y de un espectáculo típico como la danza de los Voladores de Papantla. A pesar de una agenda apretada, los Walker compartieron con CLASE qué significa para ellos formar parte de un legado. Durante la entrevista, Daisy, ataviada en un look black & white, lució un rostro sonriente y estuvo siempre respetuosa de su padre, quien por segunda ocasión visitó nuestro país. Trabajan juntos en una misión como embajadores de la firma que lleva su apellido ya que, a través de su ejemplo como padre e hija, viajan por el mundo haciendo la campaña acerca de los valores que los unen y de las cosas que disfrutan. Como miembros de un importante linaje en su país, preguntamos qué sienten de ser Walker: “Yo siempre me doy un pellizco para creerlo, y eso me pasa todos los días. Realmente es una gran privilegio. Es una gran fortuna pertenecer a esta familia y nos divertimos mucho”, aseguró Robbie mientras que para Daisy es un honor, pues lo considra un rol emocionante y un orgullo.Respecto a su viaje a México nos comentaron que estaban muy felices de venir para el festejo del Día del Padre, “hay una mayor emoción al realizar el viaje juntos y podemos observar que las familias son muy unidas, así que supimos de inmediato que el mejor lugar para celebrarlo era México”, dijo el orgulloso papá quien bromeó diciéndonos que su hija, Daisy, le había dado un gran regalo: una botella de Johnnie Walker Blue Label, “¡oh, thank you very much!”. Como buen amante de la F1, Robbie posee un auto muy especial: un Delahaye 135S y nos cuenta: “Mi padre lo compró cuando estaba en la Universidad de Cambridge, a la edad de 21 años. Fue uno de los carros de carreras mejor creados de todos los tiempos”. Este auto se usó en el film Gentleman’s Wager II, donde aparece Jude Law al volante. Daysi comentó, entre risas: “He de confesar que eso me dio un poco envidia, no poderle enseñarle a manejar a Jude Law”. Preguntamos cómo logran conjuntar su relación de padre e hija y la de embajadores de esta firma, Robbie aseguró: “Somos muy afortunados pues nos gusta tener estas conversaciones amistosas con la gente, alrededor del mundo” pues agregó que es importante hacerles conocer la historia de un hombre de su familia que realmente era admirable (Johnnie Walker) quién inició su empresa de la nada y la fue conformando con determinación, con lealtad y siempre rodeado de amigos… y anécdotas como “mi padre me decía que cuando formó su equipo para participar en carreras de automovilismo, era alguien popular”. Ambos se observan cómplices, y aunque no hay grandes muestras de cariño o contacto físico entre ellos, en sus miradas hay un profundo amor y respeto. Robbie y Daisy llevan un legado que, en gran parte, se basa en el amor a sus orígenes, acompañarse, ayudarse y disfrutar de los placeres de la vida. Alejandro MillsUna familia unida por el deporte es la que ha formado Alejandro Mills, pues mientras que él es jinete y entrenador, su esposa María Fernanda Hegewisch también es amazona, y sus hijos, Jerónimo y Lorenzo no sólo han desarrollado la habilidad con los caballos sino que también han compartido la pasión y el amor por ellos, uniéndolos no sólo en el deporte sino también en la disciplina. Compartimos una tarde de entrenamiento entre padre e hijos, en la que Alejandro comentó que la equitación les permite compartir mucho tiempo y momentos de calidad, sin descuidar su trabajo. Cada día crece su orgullo por ellos y la tranquilidad al darse cuenta que los ha educado de la mejor forma posible, pues han demostrado ser jóvenes disciplinados y cariñosos con sus padres.El jinete recordó entre sonrisas cuando comenzó inculcarle a los niños el amor por los caballos, y empezó a subirlos a los ponys a la edad de cinco años para quitarles el miedo. Para Alejandro no fue difícil inculcarle a sus hijos el amor por esta labor debido a que él de chico recibió toda la educación por parte de su familia: “Mi papá me metió a los caballos, él nunca montó ni nada pero un tío nos jaló y mi papá trató que yo siguiera en esto, siempre estuvo al pendiente de mi educación”.Explicó que la educación que recibió de su padre estuvo rica en valores, moralidad, religión pero sobre todo en responsabilidad, puntos que él ha tratado de seguir con sus hijos, pero además nos aseguró que le ha añadido varias enseñanzas que cree importantes para el desarrollo.“Me gustaría dejarles la enseñanza de la responsabilidad, de saber trabajar, de valerse por sí mismos y a tener un sentido de la moral y la ética que en estos tiempos no existe”. Además comento que ni él ni su esposa tienen que estar al pendiente de sus hijos en cuestiones académicas, pues ambos han tenido un excelente desempeño y han demostrado independencia para realizar sus deberes.Lorenzo, el menor de sus hijos, dijo: “Me llevo muy bien con mi papá, nos gusta mucho jugar golf juntos y ese es nuestro momento de distracción. Cuando sea grande me gustaría ser como él”. Y haciendo alusión a su espíritu deportista, Jerónimo concluyó: “Yo lo admiro muchísimo pues lo considero como uno de los mejores deportistas de México y me siento orgulloso por todas las cosas que ha logrado, en definitiva lo que más me gusta es ir a los concursos con él, lo más seguro es que siga sus pasos y me dedique a esto”.}* Agradecemos a Scappino por las Polos de jersey versión especial para el Día del Padre. Lorenzo LazoEl analista, quien se define como un padre liberal, orientado a una vida ilustrada, sin dogmas ni tabúes, y con la satisfacción de haber educado una niña para el futuro, nos compartió sus recuerdos. “Yo soy aficionado a la fotografía, un día le tomé una imagen a mi entonces esposa y al verla lo supe, de inmediato le dije “¿sabes qué? ¡estás embarazada!”, ella me dijo que no pero así fue, desde el principio ya sabía de su llegada y la esperaba con ansias, fue la bebé más deseada”.Pero, no todo ha sido color de rosa. Lorenzo y su hija vivieron la etapa más difícil, hace siete años cuando él enviudó quedándose totalmente a cargo de la educación y el cuidado de Lorenza, hecho que confiesa fue muy complicado pero con amor y unión lograron salir adelante. “Tuve que ser papá y mamá, lo cual no es nada fácil sobre todo porque las mujeres son más sensibles... entre madre e hija hay una vinculación que no necesita palabras, ese vacío emocional no se llena, pero se supera y es un trabajo que he realizado con mi hija todo este tiempo”.Algo que le enorgullece es que ha sabido llevar un equilibrio entre la autoridad y la confianza. Al respecto Lorenza dijo: “Él es mi mejor amigo, siempre he sido su niña así que esa frase de ‘hija de papi’ va totalmente conmigo aunque sin ser una mimada. Él es mi confidente, de hecho mis amigos se sorprenden de saber que le cuento todo y es que creo que es muy importante tener confianza pues la familia es la que siempre va a estar ahí, en las buenas y en las malas”.Hoy, Lorenzo vive una nueva historia con la actriz Edith González y la hija de ella, Constanza, con quien ha creado un lazo muy fuerte en el que construyeron una relación de apoyo, diversión y respeto. Moisés ZonanaEs productor de cine junto con Michel Franco y Gabriel Ripstein, y socio-fundador de Lucía Films. Moisés nos presenta a Maya, su pequeña hija quien, asegura, es su conexión con el universo y “sus ojos son una puerta de acceso a lo más sagrado”. En un día de Luna Llena, Natalia Schueroff y Moisés Zonana decidieron tener un hijo y fue exactamente en Luna Llena cuando Maya nació. Una vez que Naty dio a luz, Moisés se dio cuenta de que algo no estaba bien con ella y pidió ayuda. Encontró un doctor que la metió al quirófano, mientras tanto, él abrazó fuerte a su hija y le dio la bienvenida al mundo.“Se tardó en recuperar de la anemia, pero hoy sólo me queda agradecer que estamos aquí los tres”. El papá primerizo dice que es muy importante estar conectados con nuestra voz interior, estar alertas a lo que sucede. Gracias a que Moisés escuchó su intuición, pudo salvarle la vida a su esposa. Con los ojos llenos de lágrimas nos comparte: “Ya sea que elijas ser padre o pienses en tener hijos, debemos entender el milagro de lo que significa estar vivo. Si no entiendes ese milagro, difícilmente podrás transmitir a tu hijo el amor incondicional a su propia vida; lo más importante es enseñarle a un niño a amarse a sí mismo para poder amar al prójimo”.Moisés nos cuenta que, a partir del nacimiento de Maya, ajustó muchas cosas de su trabajo para no perderse su desarrollo, por ello, trata de tener las reuniones de trabajo en casa y así, entre reunión y reunión puede verla y compartir con ella. “Cuando mi hija nació, las películas que habíamos producido, mientras mi esposa estaba embarazada, ‘Después de Lucía’ y ‘Chronic’, cambiaron completamente su sentido para mí. El tema del bullying cuando ya tienes una hija es fuertísimo, me cuesta trabajo hasta verla, y respecto a ‘Chronic’, (hay una escena donde se practica la eutanasia a un bebé), no sé si me podría recuperar de eso”. Explica que en cuanto nació entendió por qué Michelle Franco es un genio, ya que sabe y entiende lo que es ese dolor, aún sin ser padre. Durante la sesión de fotos pudimos percibir la gran conexión que tienen padre e hija, fue evidente el amor a la naturaleza que Moisés y Maya poseen. La niña, de año y medio, lucía un hermoso vestido rosa del mismo color que el de su mamá, que resaltaba su belleza. En todo momento la bebé estuvo calmada, y sus padres nos confiesan que esto se debe a que Natalia, durante su embarazo, hizo Yoga Kundalini y practicó meditación con mantras, a esto atribuyen que su hija sea tranquila, compartida con los demás y dócil para convivir con adultos conocidos y con los desconocidos. A la primogénita de la pareja le hablan en español y en portugués (su mamá es brasileña). “Creemos que durante este periodo, los niños cuentan con una mente absorbente y tienen el potencial de formar cimientos más fuertes que les servirán para el resto de sus vidas”. El padre, de 38 años, asegura que: “Hay que amarse a sí mismo para poder amar a los demás, sentir más de lo que se piensa para poder transmitir a los niños la vida a través de sus sentidos”. Para el entrevistado sus principales valores son: amor incondicional a mí mismo para poder amar a mi hija incondicionalmente. Permitir que descubra el mundo por ella misma, y decir que no, sólo cuando esté en juego su seguridad. “Hay que disfrutar esta vida completamente porque ¡es un milagro! El único consejo que puedo dar, ya que soy padre primerizo, es enseñarle a tu hijo a amar incondicionalmente”.
