A Christina Lima y Rogelio López les sorprendió la facilidad con la que transcurrió el embarazo de su primer hijo juntos, el pequeño Roger. La espera del bebé la describen como una en la que no hubo ningún tipo de sorpresas, pues los nueve meses transcurrieron muy tranquilos y sin que Christina sintiera ningún tipo de achaque o dolor. De hecho ella continuó su vida durante la dulce espera como health coach atendiendo a sus pacientes y llevando su vida normal.
Tan sencillo fue el embarazo de Chris que ni siquiera sintió cuando se le rompió la fuente, misma que coincidió con una visita que tenía agendada con su doctor, quien le explicó que ya debía quedarse ese día, un 29 de enero, a tener a su hijo. “Chris me volteó a ver muy nerviosa en ese momento”, nos cuenta el piloto de la NASCAR durante la entrevista en su casa, pues su esposa no se creía que su hijo ya estaba en proceso de nacer. Y es que nos confiesan que ese día se dieron cuenta que Christina había “perdido” sin querer 10 días en la cuenta del embarazo, por lo que ya se encontraba en la semana 40, cuando ella pensaba que apenas estaba entrando en la 39.
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Ambos querían para su bebé un parto humanizado, es decir, un parto natural sin anestesia y con la opción de que el bebé naciera en agua, ayudado por una pelota o en una cama, entre otras opciones. Sin embargo, el “güerejo”, como le dice su papá de cariño, tenía otros planes para su llegada al mundo. “Yo tuve 18 horas de parto y si hubiera podido estar 10 horas más las hubiera estado, pero al bebé se le bajó el ritmo cardíaco a un nivel en el que el doctor me dijo que había que sacarlo por cesárea”, nos dice la health coach.
Tuve 18 horas de parto y si hubiera podido estar 10 horas más las hubiera estado, pero al bebé se le bajó el ritmo cardíaco”
CHRISTINA LIMA
Christina, quien tiene su empresa Medicalima en la que da consultorías y en su sitio web publica tips alimenticios y los mejores consejos para un estilo de vida saludable, está en contra de las cesáreas programadas y es una gran defensora del parto humanizado, al que describe como la experiencia más hermosa para tener un hijo y también la más real, en la que se respeta al cien por ciento las decisiones de la mamá. Y, aunque tuvo la cesárea, nos explica que sí realizó toda la labor de parto que estaba buscando para el bebé, incluido el que te lo entreguen inmediatamente tras nacer para el contacto inmediato entre la piel de éste y su mamá.
“La vi luchar así como una guerrera. Hubo un momento en el que la sacaron de la tina que yo dije ‘creo que ya estuvo bueno’, porque la vi cansada, eran como 12 horas de labor de parto en ese momento. Si yo estaba cansado, no me imagino Chris. Pero es ahí, desde esos instantes, desde ese momento, que ves lo que es ser mamá, está muy cañón. La valoro más, la admiro más”, nos confiesa Rogelio, quien además nos cuenta que estuvo presente durante la cesárea y mientras nacía su hijo le contaba a Chris la historia de cómo se conocieron. El piloto bromea y dice que todo lo compara con las carreras y para él este momento, del parto humanizado a la cesárea, fue como cuando a un auto de la Fórmula 1 le llegan 20 personas a hacerle todo tipo de arreglos.
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Su primogénito nació hasta el siguiente día a las tres de la mañana, un momento que ambos califican como indescriptible, pues en los ultrasonidos nunca lo pudieron ver bien por la posición en la que estaba, como escondido. Sin embargo, ya en brazos de Christina, al minuto el pequeño Roger se desmayó, lo que hizo que el pediatra se lo llevara a una camita para reanimarlo. “Yo creo que fue un momento comparable a cuando me dijeron que mi papá había fallecido”, nos revela Roger, “estaba la enfermera con el estetoscopio y decía ‘no hay signos vitales’. Y el doctor con una bomba de oxígeno. Yo decía ‘así no Dios’. Y Chris decía ‘¿qué está pasando?’”. Tras el susto, que Rogelio confiesa que sintió que duró una hora, cuando fueron 20 segundos, el bebé comenzó a llorar, lo que hizo que a su papá le flaquearan las piernas y se tuviera que agarrar de la cama de Chris para no desmayarse. Por todo lo que había pasado, el piloto nos reveló que bajó varios kilos durante los días que estuvieron en el hospital.
SU LLEGADA A CASA
Tras varios días regresaron a su casa a la normalidad con la que vivieron su embarazo, pues tras el susto, Roger Jr se convirtió en el bebé más tranquilo del mundo, y así nos lo dejó muy claro durante la sesión de fotos, posando en todo momento y viendo a la cámara sin necesidad de trucos.
“Lo ves y no lo puedes creer. Yo seguía diciendo que era una fantasía y lo sigo diciendo todos los días. En las madrugadas cuando me paro a darle de comer, todos los días me pregunto ‘¿es en serio, tenemos un bebé?’ Y como mujer ves muchas cosas. Me estoy viendo todos los días. Yo soy workaholic, juré nunca en mi vida dejar de trabajar. Siempre dije que iba a regresar inmediatamente a mi empresa y hoy diría: no quiero ir a trabajar. Estoy feliz como estoy”, nos confiesa ella sobre cómo le ha cambiado la vida tras la llegada de su hijo.
Cuando llegaron a casa una de las primeras cosas que hicieron fue que dejaron que sus tres perros “Mika”, “Roger” y “Danika” lo conocieran para que se familiarizaran con el nuevo integrante de la familia. Hoy estas tres adorables mascotas son los indiscutibles guardianes del bebé y hasta Christina los mandó pintar en el baby room con unos dibujos que realizó la pintora Lucero Pani.
Rogelio admite que es su esposa la que ha estado más atenta con el bebé pues él sigue trabajando de la misma manera de siempre y atendiendo sus compromisos como piloto de la NASCAR. Dos semanas antes de esta publicación, viajó solo a Monterrey para el inicio de la temporada, al go que le dolió mucho a ella pues siempre le encanta apoyarlo en sus carreras.
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Y, hablando de la profesión del piloto, le preguntamos si ya se muere por llevar a su “güerejo” a alguna carrera y de inmediato se le ilumina la cara. “Yo no sé si mi hijo vaya a ser piloto, deportista, ingeniero, astronauta o lo que sea. Pero sueño más con que practique el deporte que con que me vea correr. No sé si llegue a los cuarenta y tantos años corriendo y se acuerde de verme correr. Ya él en su libre albedrío que tome la decisión de ser uno. Pero nace en casa de un piloto, puede ver los cascos, los coches, tendrá las facilidades, pero será decisión suya. Aunque sí sueño con llevarlo a la pista y que esté emocionándose por ver los coches”, dijo.
BABY’S ROOM
Con toda la emoción por la llegada de su primer hijo Christina Lima se encargó de decorar el cuarto del pequeño. Hasta encargó a Lucero Pani una obra en la que estuvieran los tres perros de la familia.
SU NUEVA ETAPA COMO PAPÁS
Ambos no tienen más que palabras de admiración para el otro en su nuevo rol como padres. Rogelio incluso dice que, si se tiene que parecer a alguien, ojalá sea a Chris.
El piloto la describe como una “máquina en leer información” y es que, además de su trabajo como health coach, se encargó de leer e informarse sobre todo lo referente al embarazo y los cuidados de un bebé. Así mismo dice que es la mejor persona que pudo haber elegido para formar una familia, pues comparten los mismos valores. “La paz que hay en esta familia se le transmite también al bebé y es por Chris más que nada. Como mamá primeriza, dudo que haya una mejor. Con toda la paz, tranquilidad y paciencia que le transmite a él es que estos dos meses han sido los más tranquilos de mi vida”, nos asegura el orgulloso papá.
Por su parte, Christina nos habla de la ilusión con la que su esposo ansiaba convertirse en papá, una de la que ya tenía conocimiento desde el momento en que lo conoció, por lo que este era un bebé muy esperado por él. Sin embargo, lo que más le ha impresionado de él al verlo convertido en padre, es cómo le cambia la cara al ver a su hijo. “Rogelio es una persona con facciones muy fuertes. Si no lo conoces realmente dirías ‘qué onda con este sangrón’, pero obviamente yo soy su esposa, lo conozco perfectamente y sé que atrás de esa cara está la persona más noble del universo. Pero para sacar esa cara noble tendrías que ser su esposa y vivir con él, porque nadie más se la puede sacar. Y el ver que esa cara se le rompe en tres pedazos, solamente pasa con ver a su hijo. Es inmediata. Yo siempre supe que Rogelio iba a ser un gran padre”, nos comparte.
Al momento de hablar de cómo lo quiere educar, Rogelio habla más bien de lo que pretende evitar en su formación, tomando como ejemplo a su propia familia. De su papá dice que tuvo una educación estilo militar, en la que no existían otras posibilidades que no fueran los coches o el estudiar una ingeniería, y asegura que será su hijo quien tome la decisión de elegir la carrera que quiera con total libertad. “Pocas veces me acerqué con mi papá a pedirle un consejo. Yo era muy rebelde y era una de las últimas personas a las que yo acudía. Es una de las cosas que quiero cambiar. Que mi hijo sí tenga la confianza de acercarse y pedirme uno. Muchas imágenes que tengo de él en un futuro es de él pidiéndome algún consejo, me encantaría que hiciera eso”, dice el piloto.
Por su parte, Christina lo quiere educar para que sea un hombre noble y espera que sea sumamente deportista, incluso a nivel profesional como su papá. “Lo veo súper galán, caballeroso, inteligente, que le guste enaltecer a las mujeres. Como estos hombres príncipes. Aunque Rogelio me regaña yo digo que mi hijo es perfecto”, confiesa Chris como la mamá más orgullosa.
“Yo no sé si mi hijo vaya a ser piloto, deportista, ingeniero o astronauta, pero sueño con llevarlo a una pista para que practique el automovilismo”
ROGELIO LÓPEZ
CÓMO HAN CAMBIADO SUS VIDAS
Las vidas de ambos dieron un giro de 180 grados con la llegada de Roger Jr, aunque el piloto le da todo el protagonismo a su esposa, pues dice que es ella la que se merece todos los aplausos por cómo ha cuidado al bebé. “Es indescriptible el tener un hijo. Ahí si no puedo decir es comparable con, porque el sentimiento es inigualable”, comparte él visiblemente conmovido.
A Christina le ha enseñado que, definitivamente, ahora no puede tener el control de todo en su vida. “Yo siempre he sido una persona extremadamente relajada. Algo que me saque de mi centro es sumamente difícil. Pero también porque he sido una persona súper controladora y perfeccionista. Aquí no hay manera de que pueda controlar todo. Pero me ha salido muy buen niño, tampoco he sentido que las cosas se salgan de control”, confiesa.
Admite que seguro muchos pensaron que sería demasiado aprehensiva con la llegada de su bebé, aunque dice que ella se siente todo lo contrario. A ella le cambió la vida el ser mamá, así como muchas cosas que jamás pensó que podrían ser distintas.
Para Chris hubo dos preguntas durante la entrevista que la conmovieron hasta las lágrimas. Una de ellas fue el cómo siente que ha cambiado internamente ahora que tiene a un ser que depende de ella para existir. Al principio no tiene palabras, pero dice que lo resume fácil con una anécdota: “Yo viví en la Condesa por ocho años y cada vez que temblaba no me asustaba. Cuando tembló en septiembre, estando embarazada, estaba con una paciente que estaba en shock y yo estuve muy tranquila. Esta última vez que tembló, yo ya tenía a mi bebé. Y no puedo describir lo que sentí, me dio un ataque de pánico. Lo agarré, lo abracé y corrí hacia afuera. Cuando vi que ya no había pasado nada, empecé a llorar como una loca y en ese momento me di cuenta cómo cambia todo. De una cosa que yo podía controlar y dominar al cien por ciento, me volví vulnerable. Me volví una pasita”.
La otra, y es con la que finalizamos esta plática, es cómo se hubiera sentido su papá de ver a su primer nieto si aún viviera. Para Chris, su papá era la mejor persona del mundo, un compañero inseparable de su madre y alguien que la impulsó a ser mejor siempre. “Mi papá era la persona más niñera del mundo, su pasión eran los niños. Sé que se hubiera vuelto loco. Pero fuera de darme tristeza, mi matrimonio, el reencontrarme con Rogelio, mi embarazo, mi bebé, son fruto de mi papá. De él y mi suegro, porque los dos están en el cielo. Sé que hubiera sido el hombre más feliz del mundo y sé que lo está disfrutando”, dijo.
TIPS FOR MOMS
Algunas de las recomendaciones de la health coach Christina Lima para las madres
1.- LA LACTANCIA
Asegura que científicamente es un mito que la leche materna no sirva tras un determinado tiempo, así sea uno o cinco años después del nacimiento. Además, ésta evita que el bebé se enferme.
2.- LEER, INSTRUIRSE Y ACERCARSE A EXPERTOS EN EL TEMA.
El buscar asesoría y no quedarse con el primer pediatra que conozcan es un must.
3.- EL ESTAR EN UN ENTORNO DE PAZ
Para que funcione la lactancia tienes que liberar la hormona de la oxitocina, que es la generada por el amor. Sin ésta, tu cuerpo no produce el alimento para el bebé.
4.- LA ALIMENTACIÓN DURANTE LA LACTANCIA
Ella desmitifica que lo que come no afecta la leche materna y no recomienda que las mamás consuman cafeína, lácteos, trigo y soya.
5.- ALIMENTACIÓN PARA EL BEBÉ
Recomienda todo tipo de frutas y verduras y evitar siempre los alimentos procesados. Hay que combinar papillas y alimentos en trozos. De tomar siempre agua y nunca jugos.
6.- LOS SUPLEMENTOS PARA UNA MEJOR LACTANCIA
Éstos pueden ayudar, pero asegura que no existe otra manera de generar leche materna que no sea a través de la lactancia.
