
¿Cómo se conocieron?Estábamos en mi fiesta de cumpleaños, yo tenía 16 años y León era amigo de mi hermano y cuando me vio dijo que se iba a casar conmigo. Fue un flechazo, amor a primera vista. ¿Cómo han cultivado el amor?Se debe evitar la monotonía, nosotros no tenemos tiempo de aburrirnos, todos los días tenemos algo que hacer. Aconsejo a las parejas de ahora, que sean respetuosas y tolerantes, Cuando se es joven se piensa que tenemos que saber todo de la otra persona y descubrimos que no sabíamos nada y ahí está la complejidad de la pareja.¿Cómo sobrellevaron los celos?En un principio León era muy absorbente, quería estar conmigo y saber qué hacía y con quién estaba, pero llegó un momento en el que discutimos y decidimos, por el bien de la relación, confiar el uno en el otro y la relación mejoró. ¿Cómo se complementan?Somos muy diferentes, nuestra perspectiva es diversa y eso nos ha ayudado a crecer mutuamente. Yo soy emocional y soñadora y León es más práctico.¿El amor se transforma con el tiempo? Es un poco de ambas cosas, con el tiempo el amor cambia de forma pero de fondo es el mismo, lo importante es estar con una persona que ames, esa es la base de todo, el tiempo crea un vínculo muy fuerte y hay una relación distinta, quizá no de tanta efervescencia como al comienzo, pero con los años el sentimiento se hace más fuerte. ¿Cuál es su secreto para un matrimonio exitoso?Estar enamorados es la base. Después el respeto, León y yo nunca nos hemos gritado ni ofendido, darse cuenta que la otra persona tiene una vida exterior y una interior. Cada quien debe tener su espacio y compartirlo con el otro.
