Demi-Leigh Nel-Peter se coronó la noche de ayer 26 de noviembre como la nueva Miss Universo, pero antes de llevarse la gloria como la mujer más bella del mundo en este 2017, la representante de Sudáfrica pasó por una polémica que la puso en el ojo del huracán internacional.
El 5 de julio de este año, la sudafricana de 22 años acudió a un orfanato en el cual la mayoría de niños son portadores del VIH, pero la modelo fue el blanco de críticas y burlas por haber usado guantes de látex para abrazar y dar de comer a los pequeños.
Sigue leyendo: 5 fotos de Belinda que han desatado polémica en Instagram
De acuerdo con los usuarios de las redes sociales, este gesto fue visto como un acto de racismo, una muestra de desagrado a la gente humilde e ignorancia y prejuicio ante dicha enfermedad.
Las fotografías fueron compartidas por la misma Demi-Leigh Nel-Peter y por la organización de Miss South Africa, y la controversia fue mayor debido a que en las fotografías aparecen sólo niños de raza negra.
Sigue leyendo: La polémica relación de Maluma con su tía Yudy Arias
Demi Leigh respondió a la controversia con un mensaje a través de las redes: "Mis intenciones han sido completamente incomprendidas. Todos los voluntarios que asistieron a la actividad debían usar guantes porque manipulamos comida y creí que usarlos era lo que había que hacer. Además, después de que todos comieron, me los quité. Pido perdón si es que ofendí a alguien en el proceso. Espero que todos vean mis buenas intenciones: dar a 300 niños un almuerzo caliente y una manta. Con o sin guantes".
To everyone asking about the gloves, I truly hope that you'll hear my heart and understand that it came from a place of wanting to do good. pic.twitter.com/Pl5amM2gEM
— Demi-LeighNel-Peters (@DemiLeighNP) 5 de julio de 2017
Luego de ser elegida como finalista y ganadora la controversia volvió y los usuarios cibernéticos mostraron su descontento por lo ocurrido hace unos meses, y algunos estuvieron inconformes con lo ocurrido.
Por su parte, la Miss México, Denisse Franco, de 19 años y originaria de Sinaloa, no logró colarse entre las 16 finalistas, por lo que no consiguió la que hubiera sido la tercera corona de Miss Universo para nuestro país, luego de que Lupita Jones la ganara en 1991 y posteriormente Ximena Navarrete se coronó en 2010.