Sophie Grégorie Trudeau es la afortunada que goza de la compañía y el amor de uno de los políticos más admirados del momento: Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá, quien con una sonrisa envidiable y un carisma divino ha encantado a cientos de mujeres en todo el mundo.
La esposa de Justin Trudeau ha llamado la atención pues es igual de carismática que su marido. Sophie nació el 24 de abril de 1975 en Montreal, Canadá. Es hija única de Jean Gégoire y Estelle Blais quienes le dieron una vida holgada económicamente, pues formaban parte de una familia acomodada.
Sophie estudió en los mejores colegios de Canadá; su carrera profesional la cursó en la Universidad de Montreal donde eligió comunicaciones y se especializó en radio y televisión. Durante muchos años trabajó como conductora y locutora carrera que dejó cuando decidió dedicar su tiempo a apoyar campañas contra los trastornos alimenticios, pues ella padeció bulimia.
Siendo una adolescente (17 años) fue víctima de esa enfermedad y a los 20 confesó a sus padres que necesitaba ayuda, por lo que la internaron en una clínica donde recibió la atención oportuna. Dentro de sus aficiones está el yoga, actividad que practica regularmente, incluso tiene una certificación como instructora y ha confesado que su rutina de yoga fue importante en su recuperación de la bulimia.
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Además de su facilidad para tratar con los reflectores, Sophie también comparte con Trudeau el buen humor, pues en varios eventos se ha animado a cantar en público, incluso se ha parodiado a sí misma.
Su actividad como esposa del primer ministro de Canadá ha sido criticada por los medios, pues afirman que solo busca llamar la atención, tal es el caso del Día Internacional de la Mujer cuando en un discurso dijo que debían “celebrar a los hombres que nos alientan a ser quienes realmente somos y que tratan a las jóvenes y las mujeres con respeto”.
En Canadá no existe el cargo de primera dama, por ello no recibe un sueldo y únicamente tiene una asistente, por ello fue duramente juzgada cuando dijo:
“quisiera estar por todas partes, pero no puedo. Tengo tres hijos en casa y un esposo que es primer ministro. Necesito apoyo. Necesito un equipo para ayudarme a servir a la gente”.
Ante esta polémica situación Justin Trudeau enfrentó a los medios destacando que su esposa hace un excelente trabajo y que buscaría darle más apoyo. Pese a las críticas hay muchos canadienses que la respaldan por su constante labor social en favor de las mujeres y los niños.
Además la pareja es una de las más encantadoras del medio político internacional, pues hay un aire relajado entre ellos, halagos mutuos y un romanticismo que hace evidente su excelente relación.
Su historia de amor
Sophie Grégorie Trudeau y Justin Trudeau se conocen desde niños, ella sabía desde entonces que él era el amor de su vida, pero sus caminos se separaron y durante muchos años estuvieron distanciados, hasta que por azar del destino se encontraron para escribir su historia de amor, digna de un cuento de hadas.
Sophie compartía el salón de clases con Michelle, el hermano de Justin Trudeau, y constantemente acudía a la casa de la familia Trudeau a jugar, ahí conoció el amor, pues siendo una niña sabía que Justin sería alguien importante en su vida.
Con el paso de los años Sophie no olvidaba a Justin y al verlo en televisión, pues él ya era un político reconocido, sentía que había una conexión entre ellos, y aunque su mamá la criticaba diciéndole que era solo una fantasía ella se animó a buscarlo, así que le envió un mail.
Justin recibió el mensaje de Sophie pero decidió ignorarlo, pues en ese momento no estaba dispuesto a empezar una relación que no continuaría. Desde luego que ese desplante rompió las ilusiones de su enamorada, pues pensó que era una patanería.
Pasó el tiempo y el destino hizo de las suyas, pues cruzó su camino en la calle. Desde luego Sophie se siguió de largo pero Justin fue tras ella para invitarla a cenar y le pidió su teléfono. Ella, usando la ironía, le respondió que si no hubiera borrado su mail podrían ponerse en contacto.
Trudeau no perdió oportunidad y al llegar a casa contactó a Sophie y así agendaron su primera cita que fue una divertida sesión de karaoke en el departamento del político. Durante una entrevista, días antes de su boda confesó que en esa cita le abrió su corazón:
“Le dije: ‘Bueno, ya era tiempo de que llegaras. Han sido 32 años y pensé que nunca ibas a llegar. Te he estado esperando toda mi vida. ¡Eres tú!’. Lo supe ahí y se lo dije, que íbamos a pasar el resto de nuestras vidas juntos”
La boda fue en el 2005, y desde entonces están felices y muy enamorados. Justin Trudeau aprovecha cualquier oportunidad para expresar lo enamorado que está de Sophie y no se detiene al decir que es una mujer “absolutamente hermosa”. Juntos han formado una hermosa familia con sus tres hijos: Ella-Grace, Hadrien y Xavier.
