
Te presentamos algunos de los extraños comportamientos de los hombres más ricos del mundo. Mark Zuckerber y Elizabeth Holmes siempre usan camisetas del mismo color (negro o gris) y jeans para no gastar tiempo y energía pensando qué se van a poner y ocuparlo en servir a la comunidad con sus inventos; también lo hacía Steve Jobs. Charles Ergen, el presidente del consejo de administración de Dish Networks, prepara diariamente él mismo su desayuno para llevarlo a la oficina. Warren Buffett es el cuarto hombre más rico del mundo y ha creado la tradición de donar cada año una parte de su fortuna a causas benéficas. Nicolas Berggruen decidió vivir en cuartos de hotel ya que descubrió que lo material no lo hacía feliz y vendió sus mansiones y el único auto que tenía. Ingvar Kamprad, el dueño de la empresa de muebles Ikea, promueve la austeridad, reúsa las bolsas de té, nunca gasta en boletos de avión de primera clase, viaja en un Volvo viejo y sus empleados deben usar las hojas siempre por los dos lados. El empresario, aviador, ingeniero y director de cine Howard Hughes padecía Transtorno Obsesivo Compulsivo (TOC) y aunque nunca le fue detectado, al final de su vida se recluyó en hoteles, no se bañaba y sólo comía leche, chocolate y pollo.
